Este fin de semana ha sido muy electoral. Aparte de la Fiesta de la Bicicleta, que se hace todos los años, hubo otra , la de La Rosa, organizada por el PSM y que en esta ocasión cambió cena por comida y eligió Getafe para dar los premios, como lleva haciendo desde hace tres años.
El entorno no pudo ser más propicio y el tiempo acompañó, y a pesar de que al acto (y a la comida) acudieron 1000 personas entre los que se encontraba una gran representación del PSOE, con el Ministro de Justicia, Antonio Alonso a la cabeza, no estaba mal.
Los premios fueron a parar a los servicios públicos, a todos. Al gerente del Café Central, por su granito de arena a favor de la música y a la Asociación 11M. Todos acudieron a coger su galardón y sus intervenciones tuvieron todas la misma dinámica: contra el gobierno de Esperanza Aguirre, contra las privatizaciones y a favor de la libertad. Normal en un acto organizado por el PSOE, ¿no?
Todo estuvo en su línea, excepto una parte de la intervención de Rafael Simancas. Animó a no comparar los programas electorales de uno u otro partido, ya que según él, no es importante quién hace más kilómetros de tren o más hospitales o colegios, sino que lo importante es quién protege los derechos de los ciudadanos y defiende lo público.
Hombre, a mí me parece que eso así dicho es un poco irresponsable. Lo perfecto sería que se comparasen los programas, donde se incluyen todas las propuestas y que además en cada una de ellas se protejan todos los derechos y no sólo se garantice sino que se mejore lo público.
¿Cómo puede decir el candidato a la presidencia del Gobierno Regional que no se compare? ¡Pero si lo importante de un partido es su programa! ¿Cómo sabremos entonces qué harán de nuestra ciudad los políticos? No lo sabremos yendo a los mítines, que se han convertido en bofetadas al partido contrario, sino con unas buenas propuestas que están incluídas ahí, en lo que ellos llaman "compromiso".
Está claro que el programa de Simancas no debe de ser muy brillante cuando no anima a echarle un vistazo. Eso sí, últimamente sus intervenciones son cada vez más divertidas y su oratoria va mejorando considerablemente, ahí es donde engancha. Y si hay cámaras de televisión más elocuente es y más aplausos arranca . Porque realmente, no nos engañemos, eso es lo que vende, ¿quién se lee hoy en día un programa electoral? Unos pocos locos. Todo lo demás lo beben de la televisión y de los mitines-shows de moda.
Y si no que se lo digan a Moreno. El candidato del PP en Getafe está demostranso su buena planta frente al público con unas sorprendentes actuaciones. Se hace el "colegui" y tira la chaqueta al escenario como si fuera un torero. Eso a la gente le encanta, "que salao", decian algunos.
Mientras tanto, está la política de Esperanza Aguirre y Pedro Castro, la de dar razones de peso con lo realizado en los años de gobierno, dando datos, inaugurando, convenciendo de que saben hacer más cosas y mejor.
Pero la oposición que aún no ha sido parte de ningún gobierno no puede competir contra eso. Asi que les queda el espectáculo.
2 comentarios:
comidas, comidas, comidas, pero es que llevan 4 años a dieta o que!! Es que la gente no comeeeeee???
Uy Pues lo tiene crudo Sebastian ahora. ¿Volverá a Getafe para hablarnos de honestidad ahora que sabemos las nuevas noticias?
¿Volveran a hablarnos lo socialistas de que no dicen mentiras y todas esas cosas? si, seguro que sí, y no explicaran nada
Publicar un comentario